¡Realiza aquí tu test de salud reproductiva gratis!

La vitrificación de óvulos

La vitrificación de óvulos

La vitrificación de ovocitos es una técnica de reproducción asistida que implica la obtención de los óvulos de la mujer para preservarlos a temperaturas extremadamente bajas (-196°C) durante un período de tiempo indefinido.

Esta técnica se utiliza principalmente para conservar la fertilidad en mujeres por razones médicas o para aquellas que desean retrasar la maternidad. La principal ventaja es que la calidad de los ovocitos se mantiene inalterada durante todo el tiempo que permanecen vitrificados. Esto significa que los óvulos conservarán la misma calidad que tenían en el momento de la vitrificación, independientemente de cuándo la mujer decida utilizarlos.

Esta técnica implica el uso de agentes crioprotectores y nitrógeno líquido para preservar los óvulos extraídos de los ovarios de una mujer.

Razones por las que se lleva a cabo la vitrificación de óvulos

Preservación de la fertilidad

Cuando se trata de preservar la fertilidad en mujeres, este procedimiento puede llevarse a cabo por motivos médicos, como cuando la paciente se someterá a un tratamiento oncológico que afectará su capacidad reproductiva, o simplemente debido a la decisión de la mujer de retrasar la maternidad.

Postergar la maternidad hasta edades avanzadas resulta en una disminución tanto en la cantidad como en la calidad de los óvulos almacenados en la reserva ovárica de la mujer. Esto puede dar lugar a dificultades para concebir o aumentar el riesgo de aborto espontáneo a medida que la mujer envejece. Por lo tanto, es fundamental la importancia de la vitrificación de óvulos en mujeres jóvenes como una opción para su uso en el futuro.

Optimización de los ciclos de FIV

La vitrificación de óvulos ofrece una ventaja significativa en la planificación de los ciclos de FIV (Fecundación In Vitro). Esta técnica permite la acumulación de óvulos en pacientes con baja respuesta, al vitrificar los óvulos obtenidos a través de múltiples estimulaciones ováricas. Además, la vitrificación de óvulos facilita la utilización de óvulos de donantes que han sido criopreservados, evitando la necesidad de sincronizar a la donante con la receptora de óvulos.

Las etapas del proceso de vitrificación

La vitrificación de óvulos es un método de congelación extremadamente rápido que emplea altas tasas de enfriamiento y utiliza sustancias crioprotectoras para salvaguardar la integridad de los óvulos, evitando así cualquier posible daño durante el proceso.

Los crioprotectores son compuestos que disminuyen el contenido de agua dentro de los ovocitos y, de este modo, los resguardan de los efectos adversos de las bajas temperaturas, previniendo la formación de cristales de hielo.

En términos generales, el proceso de vitrificación de óvulos se divide en dos etapas distintas: una que está a cargo de los ginecólogos y otra que recae en los embriólogos del laboratorio.

La extracción de óvulos

El primer paso previo a la iniciación del tratamiento de vitrificación de óvulos implica la realización de una ecografía vaginal y un análisis hormonal en la paciente. Estas pruebas permiten al especialista evaluar la condición de la reserva ovárica de la mujer.

Luego, la mujer pasa por un proceso de estimulación ovárica controlada, similar al que se realiza en un tratamiento de FIV. El ginecólogo receta la medicación hormonal que la paciente debe inyectarse para promover el desarrollo de múltiples folículos en los ovarios.

A lo largo de este procedimiento, la mujer debe visitar la clínica cada 2 o 3 días para someterse a controles y verificar el adecuado crecimiento folicular. En función de la respuesta de los ovarios, el ginecólogo puede ajustar la dosis de medicación hormonal y la duración del tratamiento.

Al llegar al punto en el que la mayoría de los folículos han alcanzado un tamaño de aproximadamente 16 a 18 mm, el ginecólogo programará la punción folicular para la extracción de los óvulos.

La punción folicular es una intervención simple en la que el ginecólogo utiliza una aguja guiada por ecografía para aspirar los folículos y recuperar los óvulos en su interior. Este procedimiento tiene una duración de alrededor de 30 minutos y la paciente se somete a sedación para evitar cualquier incomodidad.

La vitrificación de los óvulos

Después de extraer los óvulos en el quirófano, se trasladan al laboratorio de FIV. En este lugar, el embriólogo evalúa su grado de madurez y calidad antes de llevar a cabo la vitrificación. Para esto, es necesario realizar la decumulación de los óvulos, es decir, retirar las células de la granulosa que los rodean.

Una vez completada esta etapa, el método más común utilizado para la vitrificación de óvulos es el Cryotop de la marca Kitazato. Este dispositivo consiste en un mango de plástico al que se adjunta una tira transparente. Los óvulos son cuidadosamente colocados en esta pequeña tira después de ser tratados con sustancias crioprotectoras.

Resumiendo, los pasos clave en la técnica de vitrificación de óvulos son los siguientes:

Deshidratación de los óvulos al transferirlos de un medio a otro con una concentración creciente de crioprotectores.

Colocación de entre 2 y 4 óvulos en el soporte (Cryotop) para su vitrificación.

Extracción cuidadosa del exceso de medio en el Cryotop utilizando una pipeta, de modo que se minimice el volumen remanente.

Inmediatamente, el Cryotop con los óvulos se sumerge en una cubeta con nitrógeno líquido.

Se asegura la tapa del Cryotop con precaución, evitando que la sección que contiene los óvulos salga del nitrógeno líquido.

El Cryotop se almacena en un tanque de nitrógeno líquido para preservar los óvulos durante un período prolongado.

La vitrificación de óvulos es un procedimiento que demanda una notable habilidad y destreza por parte del embriólogo, dado que implica el manejo de células extremadamente delicadas.

La desvitrificación

Cuando se va a utilizar los óvulos vitrificados, el embriólogo debe seguir un protocolo de desvitrificación que incluye los siguientes pasos:

El Cryotop se retira del tanque de nitrógeno líquido y se coloca en una cubeta que también contiene nitrógeno líquido.

Se retira la tapa del Cryotop y se sumerge la parte que contiene los óvulos en un medio a 37°C. En este medio, los óvulos se despegan gradualmente del Cryotop.

Finalmente, los óvulos se transfieren de un medio de desvitrificación a otro con una concentración decreciente de crioprotectores, permitiendo que vuelvan a hidratarse.

La transferencia de los óvulos

Los óvulos deben pasar por el proceso de desvitrificación al menos dos horas antes de ser fecundados en el laboratorio. Durante este periodo, se mantienen en un incubador con el medio de cultivo y las condiciones apropiadas.

La fecundación se llevará a cabo mediante la técnica de inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), ya que los óvulos han sido decumulados previamente y no pueden fecundarse utilizando el método de FIV convencional.

Los embriones obtenidos se mantendrán en cultivo durante un período de 3 a 5 días, y después se procederá a la transferencia de los embriones de mayor calidad al útero de la mujer, con el objetivo de lograr el embarazo.

Ventajas que conlleva la vitrificación de óvulos

Como hemos mencionado, la reserva ovárica de la mujer disminuye con la edad, lo que a menudo lleva a que las mujeres que retrasan la maternidad necesiten recurrir a tratamientos de ovodonación.

En este contexto, la vitrificación de óvulos ofrece varias ventajas significativas. Esta técnica posibilita que las mujeres que deciden convertirse en madres a edades avanzadas tengan la oportunidad de concebir hijos utilizando sus propios óvulos.

Además, la vitrificación de óvulos presenta varias ventajas adicionales:

  • Preservación de la fertilidad femenina: La vitrificación de óvulos es especialmente valiosa para mujeres que se enfrentan a tratamientos contra el cáncer o cirugías que podrían afectar sus ovarios y, por ende, su fertilidad.
  • Mayor probabilidad de éxito: Cuando una mujer decide utilizar los óvulos vitrificados, estos mantienen la edad que tenía en el momento de la vitrificación, lo que significa que son óvulos más jóvenes. Esto se traduce en una tasa de embarazo más alta y una menor probabilidad de desarrollar embriones con anomalías cromosómicas que podrían dar lugar a abortos o nacimientos de bebés con problemas de salud.
  • Procedimiento sencillo: Aunque pueden surgir complicaciones como el síndrome de hiperestimulación ovárica (SHO) u otros efectos secundarios relacionados con la medicación, en general, la vitrificación de óvulos es un proceso simple y rápido que puede ser de gran ayuda en el futuro.
  • Acumulación de óvulos: Este método implica realizar múltiples estimulaciones ováricas y punciones foliculares para vitrificar los óvulos obtenidos hasta que se alcance un número adecuado de óvulos para la fecundación. Este enfoque es especialmente útil para mujeres con baja reserva ovárica y/o una respuesta limitada a la estimulación ovárica.

En algunos casos, parejas eligen criopreservar óvulos en lugar de embriones debido a sus creencias o preferencias personales.

Precio de la vitrificación de óvulos

El costo de la vitrificación de óvulos puede variar según la clínica y los servicios incluidos en el presupuesto inicial. En general, el precio de la vitrificación de óvulos suele oscilar entre 2.500 y 4.000 euros aproximadamente.

Es importante tener en cuenta que la medicación hormonal utilizada en la estimulación ovárica por lo general no está incluida en este costo, lo que podría agregar unos 500-1.000 euros adicionales.

Otro factor que considerar al evaluar el presupuesto para la vitrificación de óvulos es si incluye el mantenimiento de los óvulos. Algunas clínicas pueden ofrecer el primer año o los dos primeros años de mantenimiento, mientras que otras no lo incluyen. Por lo general, el costo del mantenimiento de los óvulos vitrificados ronda los 300-400 euros por año.

Finalmente, cuando una mujer decide utilizar los óvulos vitrificados para lograr un embarazo, el tratamiento de FIV suele ser más económico, ya que la primera fase de obtención de los óvulos ya se ha completado. Por lo tanto, la paciente deberá pagar aproximadamente entre 1.500 y 3.000 euros, que cubren la preparación de la muestra de semen, la fecundación mediante ICSI y la transferencia de embriones.

×